may. 31, 2021 - 1 minuto de lecturaMinutos de lectura

Dolor de dientes: Algunas causas que podrías evitar

Hay muchos tipos de dolor. Cada parte del cuerpo es susceptible de ser dañada, y consecuentemente, sentir una sensación más o menos desagradable. Y los dientes, o mejor dicho, la boca, no lo son menos. 

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De hecho, según distintos estudios sobre “rankings de dolor” el dolor de la muela del juicio está en el séptimo lugar de los diez dolores más intensos del ser humano. ¿Quién no ha sentido al menos una vez algún tipo de dolor de dientes o boca?

Las sensaciones poco agradables que se pueden sentir en la cavidad oral son muchas. Pero, difieren de persona a persona y, en muchos casos, son difíciles de describir, localizar y/o cuantificar. Lo que sí es común en todos los casos, es que, mantener una buena higiene bucodental, hábitos saludables y visitar periódicamente a tu dentista, disminuirá significativamente la posibilidad de sufrir dolor de dientes.

6 causas del dolor de dientes y de boca, bastantes comunes

1. Tomar cosas muy frías o calientes y caramelos o bebidas muy azucaradas.

El dolor de dientes que se produce es punzante y dura segundos. 

Esto sucede porque la dentina, que es la capa situada justo debajo del esmalte que recubre el diente queda al descubierto; bien por desgaste del esmalte o porque las encías se retraen y dejan parte de la raíz expuesta.

Si te pasa esto lo mejor es que acudas a tu dentista a hacerte una revisión. Y que empieces a utilizar, siguiendo sus recomendaciones, una pasta de dientes para la sensibilidad dental.

2. El hábito de fumar.

Aumenta la acumulación de la placa bacteriana, lo que hace que se desarrollen enfermedades periodontales con mayor facilidad. 

Además, la periodontitis puede acabar acarreando problemas mayores. Puede provocar el sangrado habitual de encías e, incluso, la pérdida de piezas dentales o desembocar en una enfermedad sistémica. 

Si has empezado a tener síntomas, tal vez haya llegado el momento de plantearte dejar de fumar.

3. Diabetes.

Se ha demostrado la relación directa que hay entre esta enfermedad y la periodontitis. Según los últimos estudios, las personas que padecen de Diabetes Mellitus de tipo 2 sufren alteraciones en sus vasos sanguíneos que pueden impedir una adecuada circulación de la sangre en las encías. Y, por lo tanto, se producen inflamaciones y dolor.

Si tienes diabetes lo mejor es que visites al menos dos veces al año a tu dentista y le hables de tu enfermedad, así podréis tener bajo control la periodontitis. Además, ¿Sabías que una correcta higiene bucodental te puede ayudar a controlar mejor la glucosa en sangre? Pues sí, ¡hasta tal punto están relacionadas tu boca y la diabetes!

4. El dolor de dientes producido por estímulos físicos, que se conoce como dolor somático.

Es un dolor de dientes que aparece cuando se daña la mucosa de la cavidad bucal. Por ejemplo, con algún objeto o aparato que se introduce en la boca. 

Cuanto mayor es el estímulo, mayor es el dolor. Así que cuidado, sobre todo con los niños, que son expertos en causarse lesiones por objetos en la boca.

5. Mordeduras.

Agentes químicos o físicos pueden generar también lesiones iatrogénicas. Como, por ejemplo, úlceras o quemaduras que causan bastante dolor en distintas partes de la boca.

Para las aftas o úlceras que se producen por estos agentes, existen productos como el Gel GUM® AftaClear. Gracias a su composición que combina ingredientes activos como el ácido hialurónico con diferentes extractos d hierbas naturales, manzanilla y jengibre, entre otros, ayuda a cicatrizar el afta proporcionando un efecto calmante de larga duración.

6. Caries.

Es uno de los tipos de dolor de dientes más común y por los que se acude al dentista con más frecuencia. Hay gente que es más propensa que otra a tener caries, incluso manteniendo una buena higiene bucodental. Por eso, mejor que se puede hacer es tener hábitos saludables que complemente la higiene bucodental diaria.

Para ello, hay que empezar por elegir bien el cepillo de dientes. Uno de dureza media o suave, con cerdas finas que logren eliminar los restos de placa y de comida entre los dientes y las encías. 

Tener una técnica correcta de cepillado, puede evitarnos también muchos problemas. Además de cepillarnos al menos dos veces al día y durante dos minutos, es importante utilizar palillos interdentales o hilo dental para acabar de eliminar restos de comida de la boca. 

Y, para completar nuestra higiene bucodental diaria, usar siempre un colutorio.

Como se ha mencionado anteriormente, las causas son diversas y los tipos de dolor dientes o boca, difíciles de explicar y/o describir. Lo que siempre se tiene que hacer para evitar o apaciguar los síntomas es mantener hábitos saludables que contenga una constante y rigurosa higiene bucodental.  Y, por supuesto, visitar periódicamente a nuestro dentista.

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