may. 31, 2021 - 1 minuto de lecturaMinutos de lectura

La importancia de mantener una dieta sana en verano

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Con las vacaciones nos olvidamos de la importancia de mantener una dieta sana en verano. Es por eso por lo que en esta época experimentamos cambios que afectan a nuestro cuerpo. 

Para muchos, septiembre se convierte en un reto para volver a la rutina habitual. Cómo el comer de manera sana, apuntarse de nuevo al gimnasio y empezar de nuevo a practicar algún deporte con regularidad.

Cómo mantener una dieta sana en verano: 

Si no quieres que la vuelta de tus vacaciones se te haga cuesta arriba es importante intentar no perder algunas de las rutinas que contribuyen positivamente a seguir teniendo una buena salud. Aquí te dejamos algunos consejos:

1. Sigue una dieta variada: 

Procura evitar excesos y sigue una dieta variada para evitar así problemas de salud.

Con el calor consumimos más azúcar, debido generalmente al consumo de refrescos o helados. A parte de ser perjudicial para nuestra boca, también lo es para nuestra salud en general. Recuerda que todo en exceso es malo y que hay que buscar siempre un equilibrio. 

2. Beber mucha agua: 

La subida de temperaturas también implica que nos deshidratamos con más facilidad, es por ello por lo que es fundamental beber mucha agua. 

Márcate un objetivo diario para mantener tu cuerpo bien hidratado durante todo el día. Si eres de los que le cuesta beber agua puedes probar a beber infusiones frías sin azúcar o zumos naturales de frutas. Ya que también te ayudarán a beber la cantidad de líquido que necesita tu cuerpo.

3. Haz ejercicio a lo largo de la semana: 

Al menos tres días a la semana haz ejercicio. En verano tienes la oportunidad de practicar actividades acuáticas al aire libre. Recuerda hidratarte correctamente antes, durante y después de la actividad. Mejor si practicas el deporte antes o después del mediodía, cuando el sol no esté tan alto para evitar golpes de calor.

4. Duerme mínimo siete horas: 

¡Duerme mínimo siete horas para afrontar el día con energía! Hay que dormir las horas indicadas en función de nuestra edad. 

En verano, al igual que durante el resto del año, es importante mantener un horario regular de sueño a pesar de cambiar de rutinas.

5. Proteger la piel: 

Hay que proteger la piel de los rayos UV con crema solar para evitar irritaciones, manchas. O incluso, en el peor de los casos, cáncer de piel.

La vitamina D que nos aportan los rayos de sol es beneficiosa para nuestra salud, pero tenemos que tener cuidado. 

Hay muchos tipos de cremas en función de tus necesidades. Consulta en la farmacia cuál es la más indicada para tu tipo de piel.  

6. Cuídate también por dentro: 

¡Cuídate también por dentro! En este post hemos hablado de cómo cuidarse por fuera pero no hay que olvidar que también tenemos que cuidarnos por dentro. 

Prueba a practicar alguna disciplina que te ayude a relajarte, como la meditación o el yoga. Esta disciplina aporta muchos beneficios para nuestra salud como la tonificación, la relajación, concentración, la flexibilidad o el equilibrio.

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